Silvio Rodríguez, inspirador de generaciones

Llegué por San Antonio de los Baños
cuando me fue imposible no vivir.
Una loma y un río
fueron vecinos míos.
Llegué donde el amor se quiso abrir.

¿Quién no conoce estos versos del cantautor ariguanabense? Todos. Incluso muchas personas de otras naciones, principalmente de Hispanoamérica veneran sus temas, para orgullo de quienes vivimos en la tierra natal de Silvio.

Silvio es el poeta. Un poeta de incansable creatividad que ha hecho de sus canciones imágenes vividas en los diferentes espacios de su existencia. Admiro su obra, su talento, su forma de decir tan única.

Soy

de un viejo bosque de oro maderal

que los hacheros fueron a extinguir.

De una taberna rústica local,

que daba de beber al porvenir.

De un viejo manantial medicinal

que ayudaba a la sangre a revivir,

del surco de la vega original

y soy de la aventura de existir.

Es esta una imagen perfecta de sitios emblemáticos de nuestra tierra, donde convergen el verde paisaje, el Ojo de Agua, las vegas de tabaco y las noches bohemias en la Taberna del Tío Cabrera.

Inspirador de generaciones de cubanos, de chilenos y de América, refleja en sus más de 500 composiciones musicales la realidad del continente y de nuestra Cuba, tan amada por él y vilipendiada por otros que no conocen el valor de la humildad y los principios.

Silvio es hombre grande y auténtico que en tiempos de pandemia demostró su buena voluntad. Sin dudar, donó los beneficios de dos de sus conciertos en Madrid para ayudar a Cuba en la lucha contra la Covid 19. Hay tantas cosas buenas que decir de Silvio. Las acciones que realiza a favor de la naturaleza y el entorno ariguanabense, su amor por la tierra que lo vio nacer. Cuánta admiración y respeto le profesamos todos. Su obra hermosa e inspiradora, siempre está del lado de los pobres, de los desfavorecidos.

Su cumpleaños 75 es un orgullo luego de un extenso camino, donde las causas y azares no impidieron la grandeza de su obra musical y humana. Felicidades Maestro.